Santa Teresa Benedicta de la Cruz (sentencias #139)

Sé que alguien me sustenta y en eso reside mi tranquilidad y mi seguridad. No se trata de la seguridad del hombre que se siente en terreno seguro gracias a su propia fuerza, sino de la dulce y gozosa seguridad del niño que se ve sustentado por unos brazos fuertes. Seguridad que en la práctica no es menos racional que aquélla. ¿O es que sería razonable que el niño estuviese constantemente temeroso de que mamá le va a dejar caer?

Santa Teresa Benedicta de la Cruz O. C. D.