En la cama dirigiré el corazón al templo más cercano para pensar en el Señor Sacramentado, suplicando a los ángeles que velen por mí, y así, mientras yo duermo para hacer la voluntad de Dios, mi corazón vigilará.
Nota: Cantar de los Cantares 5,2: "Yo dormía, pero mi corazón velaba". San Antonio María Claret
| Claret | | Claretpropositos |
No hay comentarios:
Publicar un comentario