Santa Teresa Benedicta de la Cruz (sentencias #101)

La invocación que tantas veces repetimos en cada "Padrenuestro" de "hágase Tu voluntad" debe regular el curso de la jornada, de la mañana a la tarde. Debe atemperar nuestros estados de ánimo e incluso la vida entera. Debe ser para un cristiano la máxima preocupación.

Santa Teresa Benedicta de la Cruz O. C. D.

Padre Nieto (sentencias #87)

Somos nada, pero Dios tiene poder, sabiduría y bondad para hacer de nosotros algo grande, muy grande; y lo hará, si no ponemos obstáculo.

padre Manuel García Nieto S.J.

Santa Teresa Benedicta de la Cruz (sentencias #100)

El hombre está llamado a vivir en su interior, tomando en sus manos las riendas de todo él; sólo partiendo de aquí podrá el hombre encontrar el punto que tiene asignado en el mundo.

Santa Teresa Benedicta de la Cruz O. C. D.

Santa Teresa Benedicta de la Cruz (sentencias #99)

Quien no tenga en sus manos, firmes, las riendas de sí mismo, nunca estará en condiciones de tomar una decisión de forma totalmente libre. Siempre se dejará influir por alguien o por algo.

Santa Teresa Benedicta de la Cruz O. C. D.

Padre Nieto (sentencias #86)

Las distracciones [en la oración], aunque hemos de procurar evitarlas, será poco menos que imposible evitarlas totalmente; y hemos de sacar bien de ellas, humillándonos ante Jesús, manifestándole con humildad nuestra impotencia: que nos dé su gracia para estar atentos a su voz interior.

padre Manuel García Nieto S.J.

San Felipe Neri (sentencias #148)

Los jóvenes deben abstenerse de acariciar a los animales, pues evitándolo, más fácilmente se conservarán castos.

San Felipe Neri

Santa Teresa Benedicta de la Cruz (sentencias #98)

El hombre está llamado a tomar su vida en serio. Como esto sólo es posible desde su interior, sólo desde aquí puede encontrar el puesto que para él está pensado en el mundo.

Santa Teresa Benedicta de la Cruz O. C. D.

Padre Nieto (sentencias #85)

Cuando la imaginación o el enemigo, sirviéndose de ella, te presenta tentaciones, procura no ponerte nervioso ni inquietarte, sino con mucha paz di a Jesús: "Señor, tú sabes que yo te amo con todo mi corazón y aborrezco todo esto". Y vive en paz y alegría, porque eso no mancha nada tu alma y la ayuda para hacer más actos de amor y confianza en Jesús.

padre Manuel García Nieto S.J.